Una nueva etapa de mi vida termina para dar paso a otra que acarrea cambios y como todo en la vida, si sabes manejarlos, pueden ser buenos.
Han pasado 16 meses en los que anímicamente he estado bien, que alguno que otro se ha sorprendido por mi aptitud pero muchos otros, los que me conocen sinceramente, sabían de antemano que esto iba a ser coser y cantar (tampoco nos pasemos!) simplemente he tenido suerte.
Durante este tiempo he tenido 24/7 de disponibilidad de vida y con ello aceptar todo tipo de trabajos de woodcoins. Todos y cada uno de esos encargos me ha supuesto un entretenimiento que no os podéis ni imaginar, sin prisas, sin horarios y todo un analgésico, como cualquier hobbie, vamos.
Ahora llega el momento de regresar a la vida laboral que, por suerte, viene con cambios, un teletrabajo más que deseado que, espero, ha llegado para quedarse, con épocas presencial pero al fin y al cabo, teletrabajo desde Ourense. En casa.
Por todo ello y primeramente, dar las gracias a todos los que me han dado entretenimiento para confeccionar su madera, os digo desde aquí que no os imagináis lo beneficioso que ha sido durante esta etapa de mi vida, y en segundo lugar, aquí sigo pero con menos tiempo libre, así que no seáis osados y hagáis vuestros pedidos 3 días antes de necesitarlas, la lista de espera siempre está presente, y más con tanto evento y con tanto nuevo coleccionista.
¡Nos vemos en los eventos!
Gracias por estar ahí.
